Problemas con las Venas

 

E.U. Natalia Molina F.

Serv. Oncología Hosmil.

 

Muchos tratamientos de quimioterapia se inyectan en las venas y las venas se utilizan para obtener muestras de sangre y para pruebas diagnósticas. Por lo tanto, es importante proteger las venas de cualquier persona con cáncer. Algunas personas pasan dificultades para que les tomen sangre o para que les introduzcan las agujas en las venas porque están doloridas o son difíciles de encontrar. En algunos casos, la gente se pone nerviosa con estos "pinchazos de agujas" (venopunción). Este plan de cuidados en el hogar explica lo que usted puede hacer para minimizar estos problemas así como algunas nuevas formas de extraer sangre o administrar medicamentos sin puncionar las venas de los brazos.

 

Después de terminar los tratamientos, las venas de la mayoría de las personas vuelven a la normalidad. En algunos casos, las venas pueden dañarse durante un tiempo prolongado. La quimioterapia puede causar esclerosis de las venas, que significa que se endurecen y no pueden puncionarse de nuevo.

Los pinchazos de las agujas, en su mayoría son inevitables. Usted necesita ayudar a la persona con cáncer o proteger sus venas y evitar ansiedad excesiva en relación con este procedimiento y debe aprender las nuevas opciones a las punciones de las agujas en el brazo.

 

 

 

Llame al médico o a la enfermera si se presenta alguna de las siguientes condiciones:

 

v  Dolor, sensibilidad, inflamación, o enrojecimiento (sobre todo un trayecto enrojecido) en cualquier parte del brazo en que se han puncionado venas (venopunción).

v  Cualquier secreción, pus o ampolla en el sitio de la venopunción. La salida de líquido claro o amarillento del sitio de la venopunción podría indicar una infección. Las ampollas también tienen líquido en su interior y deben informarse.

v  La persona está tan molesta o nerviosa por las venopunciones que está pensando en omitir el tratamiento o la extracción de sangre.

v  Mantenerse caliente. El calor hace que las venas se relajen y se llenen de sangre.

v  Comer bien el día anterior al tratamiento. El alimento y los líquidos ayudan a mantener un buen flujo de sangre por las venas.

v  Tomar dos o tres litros de líquido diariamente, si es posible. Los líquidos dilatan las venas.

v  Caminar un poco mientras espera la quimioterapia o la extracción de sangre.

v  Hacer ejercicio con las manos y los brazos en casa.

v  Usar lociones humectantes.

v  Administre medicamentos contra la náusea, que favorecen también la relajación.

v  Recuerde y hable de experiencias agradables mientras espera.

v  Pida a la persona que no mire el brazo. Sugiera que mire hacia otro lado del cuarto durante el procedimiento.

v  Hable con el doctor y la enfermera respecto a la ansiedad.

v  Practique la respiración profunda, y utilícela cuando se están administrando los tratamientos intravenosos o cuando se realizan las venopunciones.

v  Practique las técnicas de relajación en casa: repítalas antes y durante las venopunciones.

 

 

 

 

Peter S. Houts, PhD. Guía para el cuidado del cáncer en el hogar. Indicaciones para el cuidado de familiares y amistades en el hogar. 1994.