CUIDADOS ENFERMERIA...

 

Precauciones a considerar luego de la Quimioterapia.

 

Introducción.

En el tratamiento de quimioterapia la persona más importante en el cuidado es el paciente, por lo que es fundamental que siga todas las indicaciones del médico. El cuidarse de forma adecuada aumenta  la efectividad de la quimioterapia, ya que esta trabaja mejor bajo ciertas condiciones.

Estar en tratamiento no implica restringir toda actividad, pero sí ciertos cambios.

 

Cambios en la alimentación.

No es necesario cambiarla radicalmente. Lo importante es tener una dieta lo más balanceada posible, ya que los alimentos son fuente de aporte nutricional y energético.

 Lo que sí se debe evitar, es el consumo de alcohol y condimentos.

Se debe aumentar el consumo de líquidos sobre todo los días en que se recibe el tratamiento, ya que algunos medicamentos antineoplásicos pueden afectar la vejiga y riñones.

 

Recomendaciones para evitar o disminuir los efectos gastrointestinales.

Se debe fraccionar la alimentación durante el día, comer lentamente y en pequeñas cantidades. Una vez que se ingirió alimentos, debe recostarse en posición semi-sentada para evitar la sensación de reflujo.

 En lo posible, se debe evitar beber líquidos una hora antes y una hora después de las comidas. Cabe señalar, la importancia de beber de a poco líquidos fríos, sin azúcar y sin gas para evitar las náuseas.

Antes de recibir el tratamiento se debe ingerir comidas livianas.

En caso de presentar vómitos, hay que suspender la alimentación por un par de horas y reiniciarla paulatinamente con líquidos fraccionados.

La diarrea es poco frecuente. En caso de que se presente, se debe comer alimentos tibios y con poca azúcar, no consumir alimentos gaseosos o flatulentos, y comer alimentos bajos en fibras.

En caso de constipación, hay que beber mucho líquido, aumentar el consumo de alimentos con fibras y realizar ejercicios suaves como caminar.

 

Prevención ante la baja de células de la médula ósea.

Se debe evitar el contacto con personas resfriadas, con cuadros contagiosos y con niños recién vacunados. Un buen aseo personal es fundamental, sobretodo el lavado de manos frecuente y el buen cuidado de la boca. También es necesario evitar las multitudes y los espacios cerrados, los cambios de temperatura,  y no consumir alimentos crudos.

Los glóbulos rojos pueden disminuir, lo que produce cansancio y somnolencia.

Las plaquetas al estar disminuidas favorecen la aparición de hemorragias, por lo cual se debe evitar cortaduras, no cortar la cutícula de las uñas, usar máquina de rasurar eléctrica y guantes de protección si se trabaja en el jardín, no ingerir aspirina y ser cuidadoso al realizar actividades deportivas.

 

Frente a la mucositis.

La boca sana requiere cuidado sobretodo en el paciente oncológico. Para ello, se debe usar un cepillo de dientes suave para evitar romper la mucosa de la boca, lavar los dientes después de cada comida y realizar enjuagues con bicarbonato.

En caso de presentar mucositis, se debe mantener un buen aseo de dientes y encías para prevenir infecciones.

Para tragar más fácilmente, se recomienda hacer algunos cambios en la alimentación como remojar los alimentos secos, licuarlos en la juguera, evitar los aliños y condimentos, junto con comer alimentos suaves y fríos como helados, flanes, frutas, jaleas y alimentos para niños.

 

Cuidados de los medicamentos.

Los medicamentos oncológicos requieren ciertos cuidados para su preservación.  Hay que considerar, que hay algunos que requieren más cuidados que otros. Pueden algunos requerir una cierta refrigeración, o estar en un lugar fresco y al abrigo de la luz.

Se recomienda conservar los medicamentos en sus cajas originales para evitar confusiones en las dosis.