Buscando las causas...
¿Qué es el cáncer?
El cáncer parte por una célula cancerosa o anormal que es débil y confusa, esta célula contiene información genética incorrecta por lo que no puede realizar su función.
Si estas células reproducen otras células con la misma información genética incorrecta, entonces comienza a formarse un tumor compuesto de una gran cantidad de estas células. Normalmente las defensas en el cuerpo, el sistema inmunológico, reconocen a estas células y las destruyen. O, al menos, las cercan para que no puedan extenderse.
Cuando son células malignas, se reproducen rápidamente y comienzan a invadir los tejidos vecinos. En las células normales existe una “comunicación” que evita que se reproduzcan en exceso, las células malignas están tan desorganizadas que no responden a esta comunicación y por eso se reproducen temerariamente.
El tumor puede comenzar a bloquear las funciones propias del organismo, incluso se pueden extender hasta el punto de que aplasten a otros órganos o bien que se hayan sustituido a tantas células saludables en un órgano, que este no pueda funcionar.
Cuando el cáncer es severo, estas células pueden desprenderse de la masa original y son transportadas a otras partes del cuerpo, donde comienza a reproducirse y a formar nuevos tumores, a esto se le llama “metástasis”.
¿Qué causas el cáncer?
Se tiende a buscar el culpable del cáncer en factores externos. Ahora todo el mundo “sabe” que el cáncer es causado por sustancias cancerígenas, por predisposición genética, por radiación o quizá por la dieta. En realidad, ninguno de estos elementos por si solos son una explicación suficiente de porque alguien tiene o no cáncer, pero cualquier explicación que quiera darse debe tener en cuenta una causa determinante de la enfermedad: la supresión de las defensas naturales de cuerpo contra la enfermedad.
Sustancias cancerígenas:
No cabe duda de que hay sustancias nocivas, como son las anilinas, los asbestos, alquitranes y otros productos químicos que pueden afectar la información genética de las células y producir cáncer.
La incidencia de cáncer aumenta notablemente conforme aumenta el nivel de industrialización. Como la contaminación ambiental es un subproducto frecuente de la industrialización y por ende se expone a la gente a estas sustancias, se argumenta que el incremento del cáncer es el resultado de la contaminación que acompaña a la industrialización, pero esta contaminación y sustancias no explican satisfactoriamente el fenómeno en su totalidad.
Si hubiera una relación de causa y efecto directa y simple entre las sustancias nocivas, los productos químicos, los irritantes crónicos y el cáncer, una mayor exposición a estas sustancias, debería causar una mayor incidencia del cáncer. Según estadísticas, aunque hay probabilidades de mayor incidencia de cáncer exponiendo a estas personas, la gran mayoría de la gente no contrae la enfermedad y gente que aparentemente no ha estado expuesta a grandes niveles de sustancias, continúan contrayéndola.
Predisposición genética:
El problema de explicar porque un individuo contrae cáncer y otro no, ha llevado a los investigadores a pensar de que existe una predisposición genética, en donde hay personas que producen una mayor cantidad de células anormales o que las inclina a tener una respuesta inmunológica mas débil. Se ha observado que la incidencia de cáncer es más alta en unas familias que en otras.
Aunque factores genéticos pueden jugar un papel importante, no se cree que puedan explicar los diferentes patrones de incidencia en el mundo. Hay que tomar en consideración los cambios estresantes asociados a la industrialización e integrar esta información en los pensamientos comunes sobre la incidencia del cáncer.
Radiación:
Se sabe que la radiación puede provocar mutaciones en las células que pueden reproducir y conducir al cáncer. Todos estamos sujetos a radiaciones:
- La tierra es constantemente bombardeada por “radiación cósmica”, provocando mutaciones ocasionales, pero ningún investigador asegura que esto no lo cause, ya que si esta radiación ambiental fuese una causa fundamental para el cáncer, sus efecto serian relativamente iguales en todos los países.
- Los compuestos fluorcarbonados de los aerosoles son capaces de destruir la capa de Ozono, lo que supondría una mayor exposición a la radiación ultravioleta del sol y esto solo se asocia con el cáncer de piel.
- También se encuentran los Rayos X y otras radiaciones utilizadas en diagnosis y el tratamiento medico. No hay evidencia clara, pero se debe tener cautela, por ejemplo, se ha observado que el uso de radiaciones como tratamientos de artritis, produce posteriormente leucemia, pero decir que es causante de cáncer, es como decir que todas las sustancias nocivas nos hacen a todos mal, pero personas que han estado altamente expuestos a Rayos X no sufren de la enfermedad y otros que se han expuesto poco siguen cogiendo la enfermedad.
Dieta:
Algunos investigadores han sugerido que la incidencia de ciertos tipos de cáncer puede estar relacionada con la cantidad de grasa en nuestra dieta. Parece que el cáncer, como otras enfermedades degenerativas, golpea más fuertemente a los sobrealimentados.
Por ejemplo, en Japón la diera esta basada predominantemente por arroz y pescado, lo que contiene menos grasa que la dieta de los americanos o europeos, observándose una menor incidencia de cáncer.
Hay factores además de la dieta que pueden explicar el bajo índice de cáncer en Japón. Los factores culturales que influyen el modo de vivir, en las creencias y sentimientos. Estos factores pueden tener gran importancia en la creación de diferentes niveles de incidencia del cáncer, ya que los modelos culturales condicionan las creencias y los sentimientos de la gente. Por lo demás hay que mencionar que muchos japoneses, con dieta sin grasas contraen cáncer y muchos occidentales comiendo muchas grasas, no la contraen.
El sistema inmunológico: nuestra defensa natural contra la enfermedad
Uno de los factores más importantes en la enfermedad y en la salud, son las defensas naturales del cuerpo.
El sistema inmunológico esta compuesto de varios tipos de células diseñadas para atacar y destruir a las sustancias extrañas. Cada vez que usted ve la formación de pus en alguna herida, esta viendo los restos del trabajo del sistema inmunológico.
El cuerpo combate las células cancerosas de forma rutinaria, y de forma rutinaria dichas células son contenidas o destruidas para que no puedan hacer ningún daño.
La teoría de la vigilancia y la susceptibilidad al cáncer.
Todo el mundo produce células anormales en su cuerpo de vez en cuando, ya sea por causa de factores externos o, simplemente, como consecuencia de una reproducción celular inadecuada. Por tanto para que el cáncer tenga lugar, el sistema inmunológico debe estar inhibido.
Tenemos la estrecha conexión entre estrés y la enfermedad. Hay niveles de incidencia de cáncer sustancialmente diferentes entre paciente que tienen diferentes tipos de problemas mentales y emocionales. Esto apunta a conexiones muy importante entre los estados emocionales y la enfermedad.
Si consideramos la interrelación de la mente, cuerpo y emociones podrían aparecer nuevas e importantes perspectivas sobre el aumento de la susceptibilidad a la enfermedad en general, y al cáncer en particular pudiendo responder la pregunta: “¿Por qué a mi?
Bibliografía: Matthews-Simonton, S., Simonton, C., Creighton, J. “Recuperar la salud. (Una apuesta por la vida)”. Ed. Los libros del comienzo. Madrid. 2005